Di Stéfano, lapidario: “Se deberían haber adelantado las elecciones»

El mundo crecerá menos en los próximos dos años, en la Argentina los problemas internos persisten y el nuevo billete de $2.000 perderá el 50% de su valor hacia fines de año. ¿Qué nos espera?

“La realidad es que Argentina está en una situación delicada y lo mejor que hubiésemos podido hacer es haber adelantado las elecciones porque tenés un gobierno sin poder. Además tenés un sector privado que no está muy motivado para invertir. Con este contexto no hay nadie que gane plata”, dijo Salvador di Stéfano, Asesor en Negocios, Económico y Financiero.

En diálogo con Realidad Económica aseguró: “Supongamos que hay una empresa que se llama Argentina. ¿Qué capital tenemos? Cero, reservas líquidas no tenés. El Banco Central no se financia ni con crédito, ni con inversiones  directas, sino que se financia no pagándole a los importadores”.

“El Estado le saca crédito al sector privado. Y si no consigue crédito en el mercado, emite y genera inflación. Entonces, todo esto deriva en una situación muy estresante para el ciudadano argentino en donde los salarios no se corrigen al mismo ritmo que la inflación”, agregó.

Con respecto al flamante billete de 2.000 pesos, Di Stefano dijo: “Cada billete que sale vale menos. Lo cual es un espanto. Ahora tendríamos que tener un billete de 40.000 pesos y estamos contentos porque salió el de 2.000, es una  cosa de locos”. 

“Habrá que ver si el cambio va a ser mejor o no”

“Mientras no aparezca algo disruptivo, esta es la dinámica que vas a tener de acá a todo el 2023. Y habrá que ver si el cambio va a ser mejor o no. El cambio no significa que automáticamente vaya a mejorar sino que vas a cambiar el rumbo y después le tenés que dejar algunos meses de maduración. Con lo cual, este escenario restrictivo, este te va a durar hasta el segundo semestre de 2024”, aseguró el analista.

Este escenario complejo se da en el marco de un año electoral y Di Stefano lo explicó así: “No sabemos quién va a ser candidato, porque eso se va a definir este mayo. Hoy la parrilla de candidatos está tratando de mostrarse, pero no está planteado poniendo en plan arriba la mesa, no hay ningún candidato que haya puesto un plan económico arriba la mesa”. 

La maraña en la que está el campo

“Lo que está pidiendo el campo es que no lo aprieten con los impuestos. El campo tiene un problema estructural. Es inviable el negocio del campo con la estructura impositiva que tiene. Ahora, la pregunta es: este gobierno, ¿puede cambiar estructuralmente el negocio del campo? La respuesta es no”, aseguró. 

Y agregó que “el campo necesita un año para levantarse porque es una cosecha por año. Entonces, lo que le dieron no sirve para nada”.

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