Río Negro anunció un fondo de garantías por 2 mil millones de pesos para PyMEs

Con un fuerte respaldo del Consejo Federal de Inversiones (CFI), la provincia de Río Negro anunció la creación de un fondo de garantías por dos millones de pesos, destinado a facilitar el acceso al crédito para pymes, cooperativas y emprendedores. El anuncio, realizado por el ministro de Desarrollo Económico y Productivo, Carlos Banacloy, en una entrevista Realidad Económica, fue el puntapié para una profunda reflexión sobre la situación fiscal, productiva y económica que atraviesa la región.

Banacloy detalló que el nuevo Fondo de Garantías de Río Negro (FOGARÍO) contará con 1.000 millones aportados por la Provincia y otros mil millones por el CFI. Este instrumento permitirá respaldar créditos por más de 50 mil millones de pesos, dando respuesta a una necesidad urgente: la falta de garantías suficientes en los sectores productivos para acceder al financiamiento tradicional.

El ministro fue más allá del anuncio y planteó la necesidad de una revisión profunda del sistema de coparticipación federal, al que calificó como “desactualizado y perjudicial para muchas provincias”. En este sentido, denunció una transferencia constante de recursos desde el interior hacia la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y reclamó una redistribución más equitativa.

“Hoy hay provincias con enormes responsabilidades como la salud, la educación o la seguridad, pero con escasos recursos frente a un Estado nacional ausente”, sostuvo.

La entrevista también permitió hacer un recorrido crítico por el escenario productivo provincial. Banacloy advirtió que todas las economías regionales están siendo afectadas por la falta de competitividad, la presión impositiva y el encarecimiento del crédito.

“Hoy no hay ganadores. No importa si el productor es tecnificado o no: los números no cierran para nadie”, sentenció.

Casos como el de la fruticultura —donde el valor de la fruta se mantiene, pero los costos se disparan— o la pesca —con barcos parados por falta de rentabilidad— evidencian un deterioro estructural. Según Banacloy, sin medidas de fondo como una reforma fiscal y laboral, la situación seguirá empeorando.

A pesar del panorama adverso, el funcionario celebró el avance de políticas que permiten reconvertir tierras frutícolas en desuso hacia producciones agrícolas como la alfalfa, que genera ingresos genuinos y permite sostener la actividad rural. También destacó la inversión en infraestructura ganadera en la Línea Sur para enfrentar las duras condiciones climáticas, y remarcó que la agenda energética sigue activa con el potencial de Vaca Muerta como motor de desarrollo.

En un mensaje final, Banacloy remarcó la urgencia de actuar antes de que el deterioro se vuelva irreversible. “

Cuando le quitás capital de trabajo a estas actividades, cuesta cinco años recuperarlas. No es como apagar una fábrica de gaseosas: la producción agropecuaria es un proceso vivo que no puede detenerse sin consecuencias”.

El ministro también subrayó que el Gobierno Nacional escucha los reclamos, pero los consensos están lejos de lograrse. “Las medidas coyunturales no alcanzan. Se necesitan decisiones estructurales y un Estado que entienda el interior del país no como un costo, sino como una oportunidad de desarrollo”.