“Mi primer cactus”, un emprendimiento que no para de florecer

Fernanda Páez lanzó con su hermana “Mi primer cactus”, un negocio que comenzó con un hobbie y se fue transformando en un emprendimiento que no para de florecer.  “Como la mayoría de los que adoran este tipo de plantas, empezamos por tener uno y verlo florecer y en el momento en que sucedió, nos enamoramos de sus flores. Poco a poco se convirtieron en más y en un año teníamos tanto que decidimos empezar a vender”, cuentan en su página.

Al poco tiempo incursionaron en las macetas, terrarios, semillas y producción por esquejes. “Participamos de la Feria Mangrullo, de Senillosa, y ese encuentro nos permitió ir a la Expo Plottier, una experiencia muy linda, y en Neuquén participamos de Germinar y de Ciudad Emprende”, contó Paéz en Realidad Económica.

De este modo, Mi primer cactus comenzó a expandirse y es así como las hermanas Páez tejieron una red con otras emprendedoras de la zona y de La Pampa. “Este año comenzamos a trabajar con otras emprendedoras. Traemos macetas de cemento en miniatura, que las hace una emprendedora de la Pampa; y también trabajamos con otra de Senillosa y con hacemos terrarios. También hacemos portamacetas de madera y empezamos la producción de semillas y aprendimos también con las carnívoras”, aseguró.

Para terminar, Páez dijo: “Es muy lindo trabajar con plantas. Este año empezamos con ventas online y nos fue bastante bien y atendemos en un local pero con turno”.