Producción de vino: Argentina brilla en un panorama sombrío

El mundo del vino, a nivel global, está transitando la peor caída en la producción de los últimos 50 años. Mientras los fenómenos meteorológicos extremos -como heladas y sequías- dejan su huella, Argentina vive tiempos de esplendor.

A la hora de analizar los datos en detalle, se puede observar que las cosechas de los tres principales mercados a nivel mundial, Italia (-23%), Francia (-19%) y España (-15%), fueron golpeadas por condiciones climatológicas adversas que influyeron en un descenso general de la producción de 8,2%, según la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV). De los 10 principales productores de vino en 2017 a nivel mundial, solo tres países arrojaron cifras azules: Australia (6%), Argentina (25%) y Sudáfrica (2%).

Nuestro país, producirá este año casi 12 millones de hectolitros en 881 bodegas elaboradoras, según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV)

Según Wines of Argentina (WofA) la causa del aumento en la producción de este año se debe a “una mejora en la cantidad cosechada respecto al 2016 debido a que no hubo accidentes climáticos destacados que disminuyeran la cosecha. No obstante, todavía no alcanzamos los niveles de 2015”.

Carlos Fiochetta, gerente general de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), opina en el mismo sentido: “El año pasado Argentina tuvo la cosecha de uva más baja de los últimos 60 años. El incremento actual responde esencialmente a un “rebote”, por decirlo de alguna manera, en la producción”. Y agregó que: “La extensión territorial del país permite el desarrollo de la vitivinicultura desde Jujuy hasta Chubut. Creo que el desafío será poder adaptarse y generar mecanismos para disminuir los efectos de los eventos climáticos extremos”.