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Polémica: Bariloche debate cómo financiar el transporte público
La situación del mantenimiento del transporte público pende de un hilo, particularmente en las ciudades del interior del país donde la distribución del subsidio nacional llega de manera despareja y donde los pasajes se vieron reducidos por la situación de pandemia y las medidas de restricción a la circulación.
En Bariloche, el escenario no es ajeno a esta crisis: A cargo de la empresa sanjuanina Amancay SRL, el transporte público en la ciudad ha sufrido paros casi todos los meses ante la falta de pago a sus trabajadores y el contrato con el Municipio corrió riesgo de caerse en varias oportunidades. De hecho, el Ejecutivo local desembolsa millonarios aportes todos los meses para sostener el servicio.
El jefe comunal de la ciudad andina, Gustavo Gennuso, comunicó que el sistema de transporte público tiene que ser modificado radicalmente y elevó al Concejo local dos proyectos para generar fondos específicos que colaboren a sostener el transporte público de pasajeros.
A través del Fondo de Sustentabilidad del Transporte Urbano de Pasajeros (TUP), se busca solventar más de 12 millones de pesos por mes, para garantizar el funcionamiento de los colectivos en la ciudad e intentar dejar de depender exclusivamente de los subsidios nacionales y provinciales.
Una de las propuestas de la Municipalidad de Bariloche fue que se implemente una tasa que grave la venta de combustibles, a razón de 25 pesos por tanque lleno. “Hay que preguntarse si realmente queremos arreglarlo o solo declamamos que queremos arreglarlo. De hecho, ningún intendente pudo resolver el problema del transporte urbano porque no hay magia en esto, la cuestión es poner fondos, trabajarlos y poner la responsabilidad de todos”, había expresado Gennuso.
Sin embargo, esta opción generó el rechazo, primeramente, de la Federación de Empresas y Entidades de Bariloche y Zona Andina (FEEBA). “Entendemos que existe un problema con el transporte urbano de pasajeros, pero es lamentable anoticiarnos de este intento por resolver los problemas del Municipio con el bolsillo del trabajador y de los generadores de empleo genuino”, manifestó la FEEBA.
Desde la federación que nuclea a las distintas cámaras empresariales destacaron que “no podemos permitir que habiendo sufrido tanto la actividad privada, se pretendan ajustar los desequilibrios fiscales del municipio generando más impuestos en vez de resolverlos hacia adentro, como sí lo hizo el sector privado una vez finalizados las ayudas generadas por el Gobierno Nacional”.
Por otro lado, desde la Cámara de Expendedores de Combustibles de Neuquén y Río Negro también impugnaron la implementación de la tasa sobre la venta de combustibles.
“Se estaría utilizando a los empresarios como entes recaudatorios de algo que nada tiene que ver con la actividad específica de las estaciones de servicios, debiendo agregar mayores controles administrativos que requieren tanto de la recaudación como el efectivo ingreso a las arcas municipales”, señalaron desde la cámara que nuclea a los estacioneros de la región.
“Ya existen suficientes antecedentes en el país donde varios municipios no pudieron concretar esta imposición, como también de otros que tuvieron que dar marcha atrás en la medida. En la provincia de Córdoba habían sancionado la famosa Tasa Vial que tuvieron que eliminarla dado que a los perjuicios expuestos, se agregaba la distorsión de precios que se producía en las estaciones que lindaban muy cerca de los límites provinciales”, remarcaron.
Finalmente, y a contrarreloj de la finalización del año, el Ejecutivo barilochense había presentado sobre tablas el proyecto que crea el Fondo Específico de Sustentabilidad Social del TUP, para ser tratado esta mañana (miércoles 30) en el Concejo Deliberante. Sin embargo, la oposición le dio un revés y pateó su tratamiento para el próximo año.
“Políticamente se ha trabajado muy mal en la búsqueda de consensos, en buscar la mayoría necesaria para aplicar los nuevos tributos propuestos”, dijo la concejal y presidenta del bloque del Frente de Todos (FdT), Julieta Wallace, en el marco de la última sesión del Concejo municipal en este 2020.
La edil confirmó que se rechazó el tratamiento exprés de los proyectos relativos a la creación de fondos para el transporte, aunque continuarán en ruta legislativa “como tiene que ser, con la responsabilidad que requieren proyectos de este tamaño, que son importantes para la ciudad. No se han conseguido los votos para que sean tratados sobre tablas, tampoco las nuevas contribuciones”.
Por Cecilia Russo
Especial Bariloche