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Agroindustria

Loyarte: “Necesitamos que se entienda cuan dañinas son las retenciones en fruticultura”

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Marcelo Loyarte, gerente general de Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI), anticipó que planean reunirse con representantes del equipo de Alberto Fernández para tratar temas de la agenda frutícola esta semana o la próxima, aseguró que impulsan una campaña de difusión sobre la complejidad que implica la producción y levantó una bandera de alerta sobre el impacto de las retenciones y la relación con Brasil. “No va a ser un año simple”, deslizó Loyarte en diálogo con LU5Agro.

Una de las grandes preocupaciones es: ¿Qué va a pasar con la comercialización en la temporada que viene? ¿Funcionará el Plan Sanitario sobre el que se estuvo trabajando? ¿Cómo lo ven?

Coincidimos en que es un gran tema a monitorear este año. Como lo venimos planteando desde que empezamos a trabajar en el Plan Sanitario, no salió exactamente como lo habíamos pedido. Queríamos que hubiera más focalización en situaciones marginales, que no iban a poder afrontar un préstamo y se iban a necesitar más recursos para atacar a la plaga. Se iban a necesitar subsidios, lamentablemente eso no salió así y salió como crédito, financiamiento.

Si bien coincidimos en que otorgar subsidios es un tema delicado, en algunas situaciones puntuales, creemos que debería darse.
Seguramente se va a poder trabajar desde el Sistema de Mitigación de Riesgo (SMR), que arrancó con todos los protocolos que están previstos para Brasil y se están tomando medidas de control. De todos modos, lo que más nos preocupa en el caso del SMR particularmente con la exportación a Brasil es que la relación entre ambos países desde el punto de vista político sea fluída. Cuando no es así, resulta más difícil poder trabajar. Creo que hay mucha más aprehensión que otros años, esperamos que sea mejor que el año pasado el desempeño de El Valle en términos de carpocapsa.

Si, de otro modo les estamos dando la excusa…

Si, el año pasado la pasamos mal; y este año no debería repetirse. Para eso venimos trabajando con las instituciones, Senasa y las provincias. No va a ser un año simple.

“Lo que más nos preocupa en el caso del SMR particularmente con la exportación a Brasil es que la relación entre ambos países desde el punto de vista político sea fluida. Cuando no es así, resulta más difícil poder trabajar”.

Recién planteabas que la expectativa de una relación bilateral fluida evita situaciones de conflicto; pero las autoridades que está asumiendo tampoco dicen nada sobre las economías regionales…

Si, estamos planteando que las retenciones representan sobre el costo de producción más de un 30% sobre la fruta. En el caso de manzanas y peras supera el 30% porque estás pagando el derecho sobre valor agregado. Es tema muy preocupante para nosotros. Desde el Comité Frutícola Frutas de Argentina,  la nueva agrupación que representa a los productores integrados de nuestro sector, cítricos, arándanos y cerezas, no sólo desde CAFI, venimos planteando la preocupación por el nivel de las retenciones de ahora y quisiéramos saber con qué nivel de retenciones nos vamos a encontrar en el futuro.

“Estamos atentos, esperamos que en los próximos días podamos reunirnos con alguien del equipo económico de (Alberto) Fernández”

Esta incertidumbre nos inquieta porque esta actividad es netamente exportadora, más del 60% de la fruta empacable se exporta así que es muy grave saber qué va a pasar con las retenciones y los reintegros. Éstos bajaron en diciembre de 2018 y eso también tuvo un impacto negativo en la actividad. Estamos atentos, esperamos que en los próximos días podamos reunirnos con alguien del equipo económico de (Alberto) Fernández, aunque no se sabe oficialmente quiénes son, para poder plantear la preocupación por el impacto que hoy tienen las retenciones y ni hablar si hay alguna idea de modificar hacia arriba ese porcentaje.

Las posibilidades de tener contacto con el gobierno entrante son muy limitadas, ¿no?

Estamos esperando las definiciones de quienes van a ser las autoridades que estén cargo de estos temas para poder sentarnos y plantearles nuestra agenda. Lo que estamos haciendo del lado de CAFI es ver quiénes van a ser los interlocutores y poder trabajar desde ahí con una agenda de temas, no sólo retenciones sino, por ejemplo, todo lo que tiene que ver con volver a tener financiamiento; necesitamos saber qué va a pasar en términos de las relaciones internacionales para ver con qué mercados nos vamos a encontrar… Estamos respetando los tiempos lógicos que son los de conformación de gabinete. Esperamos que esta semana o la siguiente ya nos reunamos con alguien.

Y ahí llevarán una carpeta con el impacto que tiene en la mano de obra como para que vean que es una economía regional que genera mucho empleo…

Si, queremos presentarnos, seguramente algún funcionario de los que vengan, conocerán algo de la actividad. Así que creemos que debemos comenzar presentándonos, mostrar dos o tres datos significativos de la actividad, como la mano de obra ocupada, el valor agregado que tiene. En esto vamos a trabajar mucho en lo que queda de 2019 y 2020, en dar a conocer que la fruticultura es una actividad que agrega valor. Nos ha pasado que está instalado que la fruta no  debería valer mucho porque pareciera que es sólo cortarla y llevarla a la góndola. Por eso estamos trabajando con la sociedad y las autoridades para dar a conocer con todo lo que implica la fruticultura, es una actividad compleja en la cantidad de procesos de producción..

“A nivel mundial la fruticultura avanza mucho y el desafío es que, en un contexto coyuntural complejo, no quedar afuera de todos estos requerimientos”

Es tremenda la cantidad de cuidados, papeles y formularios que implica certificar las buenas prácticas. A veces, se piensa que es tan tedioso que el esfuerzo no vale la pena pero si no lo hacés, no podés vender la fruta, ¿no?

El tema es que todo eso es condición necesaria pero no suficiente. No es que los consumidores porque se cumplan esas normas van a pagar un poco más por el valor de la fruta sino que lo tienen como condición para comprar. No pasa sólo acá, pasa en todo el mundo. Todos estos requerimientos, de privados y públicos, implican un costo adicional y representa una complejidad profesional muy importante.

El otro día hablaba con Daniel Manriquez, de Agrofresh, y me decía que la FAO determinó que entre un 30 y 40% de la fruta se pierde a nivel mundial por problemas de conservación. La gente no sabe que una manzana, que cosechas en marzo y se consume en diciembre, tiene una inversión enorme en infraestructura y tecnología para llegar sana y salva…

Estas cuestiones requieren inversión, profesionalismo, ciencia y tecnología… Muchas veces nos cerramos a hablar de la crisis económica, pero a nivel mundial la fruticultura avanza mucho y el desafío es que, en un contexto coyuntural complejo, no quedar afuera de todos estos requerimientos. Por eso trabajamos en material de difusión en relación a la complejidad, el profesionalismo y el valor agregado que tiene.