Huillín, ponchos cambiadores especialmente pensados para la Patagonia

“Uno se reinventa y lo tuvimos que hacer por la pandemia. Así fue que lanzamos Huillín, un emprendimiento de ponchos cambiadores de mircrofibra de toalla para después del agua”, contó Cecilia Russo desde Bariloche.

Los ponchos están especialmente diseñados para el cambiante clima de la región. “Están hechos de microfibra de toalla. A diferencia de la toalla común, es una tela que seca rápido y genera más calor. Por lo general en otros lados del país se hacen de toalla, pero no tienen las inclemencias del tiempo que tenemos en la Patagonia”, contó Cecilia en Realidad Económica.

“Los hacemos amplios, con capuchas y cerrados a los costados por si se levanta viento. Así te podés cubrir mejor el cuerpo. Los hacemos para niños y adultos, de acuerdo a la altura. Tenemos variedad de colores y los podemos hacer a medida”, aseguró la emprendedora.

¿Cómo surgió el nombre Huillín? Cecilia responde que la elección tiene varios motivos. “Es una nutria de la Patagonia, está en peligro de extinción y es el emblema del Parque Nacional Nahuel Huapi, que es donde nosotros vivimos. Lo utilizamos porque son pochos para después el agua y el huillín es un excelente nadador”.

Y agrega que “vinculamos el emprendimiento con cuidar el entorno en el que estamos, con fomentar actividades al aire libre y la conservación de este animal que es bien patagónico. Te llevas la malla, el mate y el poncho en la mochila. ¡Qué todos anden con los huillines por la playa!”.