Internacionales
Argentina, entre los peores en un ranking de riesgo para inversores
The Economist, prestigiosa revista especializada en economía, dio a conocer un nuevo informe sobre el riesgo de inversión en América Latina. En su trabajo, que contempla los efectos de la pandemia, la publicación coloca a la Argentina entre los peores países del ranking. Solo la superan Venezuela, Haití y Cuba. “Si no se corrigen los desequilibrios macroeconómicos se producirá un fuerte ajuste monetario e inflacionario”, advierten.
“Se presta mucha atención a los impactos inmediatos de la pandemia, pero nosotros estamos mirando hacia adelante a los grandes cambios en la política que podrían ocurrir después de Covid-19”, destacan a partir del informe “Populismo y política: el riesgo operativo en América Latina”.
“2021 es otro año electoral importante para América Latina, con elecciones presidenciales en varias economías grandes como Ecuador, Perú y Chile, y elecciones de mitad de período en mercados regionales clave como México y Argentina”, contextualiza el reporte. Y continúa: “En la mayoría de estos comicios parecen surgir algunas tendencias principales: un claro aumento del sentimiento anti-incumbencia, la demanda de un mayor papel del Estado en la economía (al menos mientras continúe la pandemia) y una creciente preferencia por soluciones políticas populistas entre una proporción cada vez mayor de la población”.
El informe se centra en tres ejes de riesgo. El económico, el riesgo político y el riesgo político de las inversiones. En la mayoría de los casos, Venezuela es el país peor posicionado.
Entre las claves que alarman, el informe apunta a un posible aumento en el riesgo de seguridad para la región. La pandemia “producirá nuevas oportunidades para el crimen organizado”, destaca. Y no descarta que lo mismo se vea en la “ciberdelincuencia”.
La publicación destaca como principales inconvenientes para los líderes de la región a “la falta de margen de maniobra política para seguir reforzando las medidas de apoyo fiscal sin crear preocupaciones sobre la solvencia que luego se conviertan en inestabilidad macroeconómica”.
“La creciente presión fiscal, las demandas post pandémicas de un mayor papel del Estado en muchos sectores clave y el aumento de los actores políticos y las propuestas políticas populistas sugieren que existen riesgos políticos para las empresas, además de los riesgos macroeconómicos destacados anteriormente”, subrayan.