La nevada que no llega: El desafío de llevar nieve a la montaña

Por Ceci Russo
Desde Bariloche

Luego de un invierno con nevadas históricas en 2020 (pero sin turismo habilitado al 100%), encontrar las montañas de Bariloche tan faltas de nieve durante la temporada actual, es algo que deja a todos sin palabras. Subimos al emblemático Cerro Catedral, desde donde nos hablan del enorme desafío de esquiar sin nieve. 

Altas temperaturas y escasas precipitaciones hacen que Cerro Catedral esté poniendo su máximo esfuerzo en la generación de “nieve técnica” en los sectores que cuentan con sistema de innivación -tiempo que permanece la nieve sobre el suelo- y en el movimiento con pisa pista en el sector alto de la montaña para lograr conectividad dentro del centro de esquí.

Además, desde la semana pasada trabajadores del centro de esquí e instructores de clubes, escuelas e independientes, se convocaron para retirar piedras de las pistas y acercar nieve manualmente desde sectores donde las máquinas no pueden acceder. De esta manera las máquinas pisa pista podrán terminar de preparar las conexiones y entre todos mantener la oferta de servicios en la montaña.

“Tuvimos una preapertura del centro de esquí, en la base, en el sector conocido como Play Park, gracias a la fabricación de nieve técnica”, explicó Belén Jonsson, responsable de Comunicación y Relaciones Institucionales en Catedral Alta Patagonia.  “Y gracias al trabajo  del equipo de pisado pudimos habilitar algunos medios de elevación para esquí en altura. Estamos haciendo técnicas de orugado en la montaña para que se enfríe y poder abrir nuevos servicios para turistas que llegan a Bariloche.

A conrareloj para salvar la temporada. Diego Feerira/Catedral

El Master Plan de Catedral contempla una inversión de 7 millones de dólares en el sistema de fabricación de nieve. En cuanto la primera etapa de la obra, el sistema comprende la instalación de equipos de innivación que permitirá asegurar la cobertura de 11,7 hectáreas con nieve técnica desde el sector de Plaza Oertle hasta la base de Catedral.

¿Qué función clave brindan los cañones de fabricación de nieve?

Este año, que las nevadas son escasas, se puso en evidencia lo importante que es la fabricación de nieve técnica. Tenemos más de 20 cañones amarillos, muy grandes, a los cuales llega agua a través de un sistema de bombeo, que con presión  y la temperatura y humedad justas, se convierte en nieve, sin ningún aditivo. Lo que tiene de particular es que dura siete veces más que la nieve natural, ya que el grano tiene un poquito menos de aire, es más densa y soporta  un poco más las situaciones climáticas adversas.

¿Cómo se viene dando la llegada de turistas?

Lentamente va llegando gente a Bariloche, cumpliendo con todos los protocolos que se exigen tanto para ingresar a la ciudad como al centro de esquí. Para venir a Río Negro, en transporte público, hay que presentar PCR negativo y, en todos los casos, tener aprobada la aplicación Circular RN. En Catedral, las pautas nuevas de comportamiento tienen que ver  con las que venimos adoptando en nuestra vida cotidiana, como el uso del tapaboca, distanciamiento social en espacios comunes y demás, pero el deporte en sí requiere ese distanciamiento y, también, la ropa que usamos por el frío es bastante amigable con estas medidas.

Los cañones a toda máquina. Foto Julián Donatelli/Catedral.

¿Qué expectativas tienen con respecto a las vacaciones de invierno en Buenos Aires?

Esperamos gente, pero de todas maneras apuntamos a llegar a un 50% de un invierno normal. Todo es bienvenido. El año pasado pudimos operar con público residente y eso nos facilitó la posibilidad de probar los nuevos protocolos. Internamente también tenemos medidas, nos tomamos siempre la temperatura, sanitizamos los medios de elevación constantemente. Es un trabajo bastante complejo, pero estamos acá, tratando de sacar todo adelante  para ofrecer el servicio más seguro.

Para los que no quieren esquiar, ¿qué opciones hay?

Tenemos ascensos a diferentes puntos de la montaña, con vista 360º de la Cordillera de los Andes, y paradores gastronómicos, más de 10 en altura, para disfrutar un chocolate caliente con este panorama que ofrece Catedral.