“COVIAR se transformó en una cámara de segundo grado”

Hace unos días, Guillermo Barzi, presidente de Bodega Humberto Canale, se sumó al escándalo de las bodegas al decir que se desvirtuó la administración de la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR), “se creó un elefante blanco”, dijo. ¿Cómo sigue el enfrentamiento dentro del sector vitivinícola?

Patricia Ortiz, titular de Bodegas de Argentina, aseguró que “no es un problema de ahora sino que es un reclamo de hace años. En el tiempo hemos visto que el manejo que ha tenido la COVIAR ha ido mutando y en lugar de ser lo que tiene que ser, se transformó en una cámara de segundo grado”.

¿Cuáles son los objetivos centrales de la dependencia? Ortiz responde que “la COVIAR es una entidad que se creó en 2004 cuando se hizo el `Plan estratégico vitivinícola 2020`. Es la que administra los fondos para que ese plan se cumpla y fiscaliza que los objetivos vayan cumpliendo en tres ejes: mercado interno, mercado externo y pequeños productores”.

“Hoy vemos que en el presupuesto no están las asignaciones como deberían para que se cumplan los objetivos, vemos que se están gastando fondos para promover a la COVIAR como institución y no al vino”. Y agregó: “Han estado muy activos mostrando los logros del plan estratégico cuando vemos la crisis profunda del sector un desplome del mercado interno y un mercado externo que no crece”.

“Estamos viendo con preocupación que ese plan estratégico fracasó, tenemos que hacer una crítica de lo que pasó antes de formular un nuevo plan”, concluyó Ortiz.