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Bacman: “Es la economía, estúpido”

Published

6 años ago

3 septiembre, 2018

Entrevista a Roberto Bacman, de CEOP

El sociólogo Roberto Bacman, titular de la consultora CEOP, analizó el panorama de la política argentina mientras el país transita una profunda crisis económica. ¿Cómo mide Marcelo Tinelli?, ¿cuáles son los temas que preocupan a los argentinos?, ¿nos importa la corrupción? ¿se profundiza la grieta? son sólo algunos de los temas que repasa el analista.

¿Cuáles son los políticos con mejor imagen, y cuáles con la peor imagen?
En general, es una época de vacas flacas para la dirigencia política argentina. Quizá la única política argentina con una imagen positiva significativa es María Eugenia Vidal aunque en el último mes su imagen bajó algunos puntos producto del affaire de los aportantes truchos y quizá la están tocando los problemas en la economía del gobierno nacional que también impactan en los dirigentes de Cambiemos. Lo anterior incluye al presidente (Mauricio) Macri, cuya imagen está en el orden del 34%. La aprobación de su gestión está en el 31%. Tengo alguna medición de Cristina Fernández después de los allanamientos, su imagen venía creciendo y probablemente todo este tema tenga alguna consecuencia. Aunque al igual que en el caso de Macri con ese 34%, que representa el núcleo duro, Cristina tiene un 34/35% de imagen positiva, que es muy difícil que se mueva. Esos dos segmentos son los dos lados de la grieta que hay en la Argentina en cuanto a la interpretación del kirchnerismo y de Cambiemos. En el resto de los dirigentes la imagen es de regular para abajo, incluye a todos los presidenciables. No es una época de grandes imágenes, la gente está preocupada por la economía y con estas cosas que pasan (los cuadernos y los aportantes truchos), se enoja mucho con la política. No estamos en la situación de 2001, del “que se vayan todos”, pero cuando vienen estas crisis económicas, la gente se enoja y bajan las imágenes.

Habrá que ver cómo sigue la cuestión y habrá que ver si la oposición, que hasta ahora no ha dado una respuesta concreta es capaz de presentar un proyecto alternativo al modelo económico del macrismo. Éste es su desafío, más allá de encontrar un buen candidato. La gente está esperando un proyecto alternativo.

¿Han medido a los gobernadores patagónicos?
No, no tenemos mediciones.

En el contexto de este enojo de la sociedad con la clase política, se lanzan nombres de outsiders como Marcelo Tinelli. ¿Lo han medido?
Lo hemos medido y tiene una imagen positiva alrededor del 40%, pero no está asociado con la política. Si se lo mide en cuanto a la probabilidad de voto, no es tan alta. Ocurren varias cosas, con la crisis económica y los cuadernos, las elecciones del año que viene se alejaron mucho de la percepción de la gente. Creo que la gente tiene otros problemas actualmente, está preocupada por llegar a fin de mes, por pagar los servicios, porque la nafta es cara. Todas estas son preocupaciones más significativas que pensar en un presidente que lo ven lejano. ¿Tinelli? Tiene el posicionamiento de un dirigente del mundo del espectáculo, de ahí a pegar el salto a la política todavía no lo vemos.

¿Qué temas preocupan a los argentinos? ¿Corrupción? ¿Economía? ¿Pobreza?
No hay argentino que no esté preocupado por algún tema que esté vinculado de una u otra forma con la economía. En primer lugar, la inflación, la marcha de la economía en su conjunto, el aumento el dólar descontrolado. Luego, viene el temor a perder el trabajo. ¿Por qué? Porque volvieron a cerrar negocios, talleres, fábricas en el interior del país y en el Gran Buenos Aires que son los lugares donde más se siente esta crisis. Después aparece la inseguridad y recién después aparece la corrupción, tema que se moviliza por los cuadernos de Centeno. Hasta el mes pasado, la educación pública preocupaba más que la corrupción y también los conflictos con los docentes en muchas provincias y el problema universitario. El tema de la educación también está de alguna manera relacionado a la economía.

Así como se registra la relación entre la educación y la economía, ¿cree que se analiza el puente entre la corrupción y la economía?
Es un puente que aún no se ha tendido. Hay que hilar demasiado fino para encontrar ese puente. Sí hay gente que se enoja con el gobierno anterior. El grueso de la población no lo analiza así.

¿Cree que los escándalos de corrupción de la argentina agudizaron “la grieta” o hizo que gente acercara posiciones?
Profundiza la grieta, tensa la cuerda. Las imágenes representativas de esa grieta son Macri y Cristina. Ellos son los dos extremos y en el medio se ubican los independientes, que están preocupados por la economía y ven muy lejos las elecciones. Los cuadernos de Centeno no movilizan al núcleo duro de Cristina, que siguen pensando que ella no tiene nada que ver, y los de Macri, que creen que él es una víctima del gobierno anterior.

¿Cómo cree que la historia recordará esta época?
Hay que ver cómo termina la historia de la crisis económica y los cuadernos de Centeno. Si el gobierno no logra encontrar la solución a la economía desde este modelo, va a quedar como uno que fracasó económicamente a pesar de contar con un amplio apoyo popular. No le encontraron la vuelta a la economía en casi tres años, quizá un poco en 2017 de cara a las elecciones. Pero 2016 y 2018 han sido años muy malos y este año ha generado mucho temor en la gente en relación a las expectativas de futuro.

La tendencia alcista del dólar habla de una economía que no está encaminada y si este gobierno mejora un poco la economía el año que viene, y el peronismo sigue dividido sin capacidad de seducir a la gente con un proyecto alternativo, el gobierno volverá a ganar. Es una hipótesis posible porque depende más de la actitud del peronismo que la del propio gobierno. Todo esto está por verse

¿De qué manera y en qué medida la opinión pública define o influye en la agenda política argentina?
La opinión pública influye. Algunos la toman más y otros menos. Para este gobierno influye mucho, es uno que le da mucha importancia a las encuestas y los focus. Hay otros gobiernos de anclaje más populista que no le dan tanta importancia. Un ejemplo: después de la 125 parecía que el kirchnerismo estaba muerto, siguieron trabajando, se dio la muerte de Néstor, y el gobierno K impuso la agenda con acciones como la reestatización de Aerolíneas o YPF, todo esto impactó. El problema que tienen hoy es que con las medidas que han tomado no han podido tener ese éxito y siguen buscando qué es lo que a la gente le provoca rechazo porque no pueden encontrar el camino contrario. Este gobierno para instalar una agenda que tenga éxito debe resolver el problema económico.

¿Cuáles son los temas que hoy están instalados en la opinión pública que le quitan el sueño a la clase política?
Lo que le quita el sueño a la clase política hoy es la economía. Los cuadernos de Centeno traen a colación los viejos temas de la política argentina como la cartelización de la obra pública y la patria contratista que ya había empezado con los militares. Todo esto le tiene que quitar el sueño a los políticos. Ya lo dijo James Carville (asesor del demócrata Bill Clinton), “es la economía, estúpido”. La que siempre pago más es la economía. Nunca un presidente ha sido electo por un tema de corrupción, aunque sí fue una consigna particular al plantear un cambio con un significante vacío en 2015. Macri no planteaba un cambio en especial y es evidente que el kirchnerismo no supo leer qué necesitaba la sociedad. Esta necesidad de cambio, de renovación que se lee en la aparición de potenciales candidatos como Marcelo Tinelli, hacen que hoy, a la política, le estén preocupando cosas como: ¿Qué pasa con estas imágenes rezagadas?; ¿qué pasa con la gente enojada?; ¿cuál es el desafío para las próximas generaciones?; y la necesidad que aparezca gente de la política que no esté tan embarrada.

Redacción: Carla Barbuto
Producción: Cecilia Russo