Entrevista Realidad Económica
Álvarez, claro como el agua: “Estamos en el ojo de la tormenta”
Los mercados financieros del mundo mostraron ayer una recuperación, luego del “lunes negro” provocado por el desplome del precio internacional del petróleo y la incertidumbre económica generada por la epidemia del coronavirus.
“Tenemos que entender lo que está pasando. Hay que visualizar que hay un impacto global el un virus que está paralizando economías desarrolladas, como China e Italia. Se paraliza la producción, las fábricas dejan de trabajar, los consumidores no consumen.. Por parte de los inversores este cuadro genera la duda y la preocupación de cuánto se va a extender la situación”, explicó Rodrigo Álvarez, economista director de la consultora Analytica.
En el contexto de la crisis sanitaria global, anteayer Italia estableció un bloqueo total del país y el virus continúa expandiéndose por Europa. “Hoy está China e italia paralizadas, se va a sumar España, Francia, Alemania… Pareciera que va a ser un impacto transitorio y que en algún momento se frena. De hecho, hay indicadores en China en relación a que en algún punto el nivel de contagio se estabilizó y que eventualmente alguna vacuna va a aparecer. Pero la preocupación de los inversores es qué tan profundo va a ser”, dijo Álvarez.
“Esto genera un desplome, un ajuste de la posibilidad de ganancia de las empresas y los inversores se desprenden de sus activos, prefieren mantenerse seguros. Esto provoca el desplome de las cotizaciones, comentó el economista en diálogo con Realidad Económica.
A este panorama se le sumó la guerra petrolera. “En un escenario en el cual la demanda global de petróleo se está desplomando, resuelven que la producción no va a recortarse sino que va a aumentar. Sobre llovido, mojado”, señaló.
¿Vaca Muerta está muerta?
Álvarez plantea que el contexto de ajuste del precio internacional “es una oportunidad para que se tome una posición estructural sobre el valor de los combustibles y de cómo se van a generar incentivos. Cuando los precios eran elevados, las empresas pedían tomar el precio internacional y ahora, que cayó, hay un espacio para que el Estado mantenga los precios con un compromiso por parte de las empresas y se logre un acuerdo para el día de mañana cuando la situación vuelva a la normalidad. Creo que hay que utilizar esta coyuntura para llegar a acuerdos de largo plazo y es un buen momento”.
¿Una nueva versión del barril criollo sería parte de este acuerdo estructural? Álvarez dijo: “Creo que es una herramienta viable porque es necesario sostener la producción y el empleo, y las empresas tienen que sostener las inversiones. Un desplome en este sentido (de la actividad y el empleo) sería mucho más preocupante”.
“Habría una transferencia de recursos de la sociedad a ese sector, al igual que como cuando había una transferencia del sector a la sociedad cuando los precios no ajustaban al nivel del precio internacional. Me parece que hay que pensar que los precios están bajos pero que el día de mañana pueden subir”.
El economista se preguntó: ¿Alguien puede garantizarnos que el precio del petróleo seguirá el año que viene a 30 dólares? ¿O se puede ir a 60 o 90? “Estamos hablando de un recurso estratégico y Argentina tiene la capacidad de sostener la producción, de poner un valor al recurso y mañana seguramente va a poder aportar divisas que Argentina necesita para crecer. El riesgo es que en dos años volvamos a ser importadores”, dijo contundente.
Renegociar en tiempos inciertos
En esta coyuntura también está la discusión de la deuda, que también tiene sus elementos a favor. Hoy un bono de Estados Unidos rinde menos de medio punto porcentual. La Argentina puede ir con una propuesta de baja en el pago de intereses y tal vez los inversores lo vean con mejores ojos que lo que lo hacían hace un mes”, dijo Ávarez.
Y concluyó explicando que “estamos en el ojo de la tormenta y todo está teñido por esa incertidumbre pero hay que empezar a encontrar elementos positivos, que los hay”.