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Economía

Schpoliansky, sobre la inflación sin techo: “Tenemos una inconsistencia fiscal y monetaria muy fuerte”

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La inflación de septiembre fue del 2,8% en comparación a agosto de 2020, mientras que respecto de septiembre de 2019 el incremento fue del 36,6%, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Este índice, uno de los más altos del mundo, sube a pesar del congelamiento de precios y parate de la economía.  

“La inflación viene aumentando y era esperable. En la medida en que la actividad económica comienza a reactivarse es posible que haya aumento de precios porque la demanda empezó a  traccionar”, dijo Fernando Schpoliansky.

Y agregó que “estamos en una economía virtualmente paralizada, con congelamiento de tarifas, atraso en las negociaciones paritarias, algunos sectores de la economía sin abrir por la cuarentena y aun así, la inflación se mantiene elevada”.

Se trata de la suba del Índice de Precios al Consumidor más alta desde marzo del 2020, superando a agosto que había sido del 2,7%. 

 

“La inflación viene aumentando y era esperable”.

 

Escalada en cuestiones básicas

El INDEC también indicó que Alimentos y bebidas no alcohólicas -que más incide en sectores de menores recursos- tuvo un incremento del 3% en septiembre y fue la de mayor incidencia en el Nivel general y en todas las regiones. 

“Se destacaron las subas en frutas, verduras, tubérculos y legumbres y carnes y derivados, que fueron parcialmente compensadas con aumentos menores –e incluso algunas bajas– en Productos lácteos, Aceites, grasas y manteca, y Bebidas no alcohólicas”, señaló el organismo. 

Schpoliansky alertó: “El dato más preocupante es que los incrementos más elevados se dieron en alimentos, bebidas y vestimenta. Es decir, cuestiones básicas”. 

 

 

 

“Una combinación letal”

Según las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), este año, con un 39,5%, la Argentina ocupará el octavo lugar en el ranking de inflación mundial, detrás del 15.000% de Venezuela, Zimbabue, Sudán, Surinam, Yemen, Irán y Sudán del Sur.

“En la región, Argentina es el segundo país con más inflación después de Venezuela, que tiene una situación desastrosa en términos institucionales y económicos. Países como Perú, Colombia, Chile o Brasil tienen inflaciones anuales del 2 o 3%”, aseguró Schpoliansky.

En su espacio habitual en Realidad Económica, el analista agregó: “A Argentina se le suma un profundo desequilibrio fiscal. Tenemos una inconsistencia fiscal y monetaria muy fuerte y eso no genera una expectativa positiva para la inflación, y mucho menos la emisión monetaria”. 

“Es de esperar que en una economía normalizada -sin congelamiento de tarifas ni precios- la inflación se acelere. No sabemos hasta dónde. en la medida en que la economía se abra, no hay oferta y con la emisión monetaria, es una combinación letal”.