Hoteles, en al línea de largada: “Es alentador que se active el turismo pero necesitamos aviones”

Días atrás, la provincia de Río Negro presentó el “Protocolo Modelo” del Plan de Apertura Gradual del Turismo, para lograr el paulatino regreso de la actividad a San Carlos de Bariloche, tomando todos los recaudos necesarios ante la pandemia de Covid-19.

Finalmente, el Ministro de Turismo y Deporte de Nación, Matías Lammens, confirmó la aprobación del protocolo para que los rionegrinos puedan hacer turismo en la localidad cordillerana.

Con este anuncio, hoteleros, agencias de viajes, guías y demás referentes del sector celebraron la noticia aunque coinciden que “todavía falta mucho”.

Alberto Holgado, dueño del hotel Charming Luxury Lodge –ubicado en el km 7,5 de Bariloche – aseguró que “es alentador que se active el turismo pero necesitamos que esté la autorización para que empiecen a venir los aviones. Estamos a mucha distancia de las grandes poblaciones y si no se activan las rutas aéreas,  es muy poca la gente que va a llegar en auto hasta acá”.

¿Cómo están preparando las instalaciones del hotel?

Tenemos restaurante y hotel, algunas cosas van de la mano y otras son un poco más separadas. En el restaurante, cuando llega la gente, tienen que pasar por una alfombra sanitizante, después les tomamos la temperatura y le anotamos todos los datos en caso de que surja algún contagio.

En el Restó Stag, las mesas ya estaban separadas así que no tuvimos que hacer grandes cambios. En cada una está el alcohol en gel y le damos a cada comensal una toalla deshidratada que humedecemos con alcohol. Eso queda en la mesa durante todo el servicio, así, cuando traen una bebida, un vaso, un plato, siempre está la posibilidad de pasar esa toalla por las manos para higienizarse. 

No tenemos carta sino que todo se maneja con el código QR y las mesas están organizadas para que las personas estén a 1,5 metros de distancia.

Sobre la organización del hotel, la gerente general  de Charming, Tiziana Mongiardini, aclaró que “adaptamos el protocolo que se mandó desde Nación y Provincia”. 

¿Cómo planifican la llegada de los huéspedes?

Tenemos el ingreso con alcohol, alfombra sanitizantes, aparatos para tomar la temperatura, las valijas las debe tener cada huésped y se deben desinfectar las manijas. Todo lo que tenga contacto con las manos de las personas, debe ser constantemente desinfectado. 

En cuanto a la recepción, hay un panel de división con el huésped como se está usando en diferentes comercios, para no tener contacto. También se ponen contenedores para las llaves y las biromes, para ser desinfectados. 

Se están trabajando en muchos hoteles es el web check in, donde no hay contacto con los recepcionistas para hacer un registro. Es algo más sofisticado. También se está ofreciendo a los hoteles sistemas automáticos de apertura de habitación, sin la llave del hotel, con bluetooth aplicado en el teléfono del huésped para que pueda ingresar sin tocar nada. 

Dentro de la habitación se minimiza todo objeto de decoración o redundante, tratamos de quitar todos esos objetos que no hacen al servicio específico del alojamiento, como adornos, jarras, cafeteras. Y también se está indicando poner la ropa blanca en bolsas para que lleguen impecables al huésped. 

¿Cuál es el cupo normal que tiene el hotel y cuál es el que se acepta ahora?

En hotelería no hay cupo, hasta el momento. En el restaurante redujimos la cantidad a la mitad. Nosotros tenemos una capacidad máxima de 50 huéspedes. La realidad es que haríamos una fiesta si tenemos ocupación plena ahora en reapertura. Sí hemos pensado en darle una habitación al huésped que no haya sido utilizada en las últimas 24 horas.

¿Cuáles son las responsabilidades que les toca sobre el cuidado de los turistas, y cuáles quedan en la responsabilidad individual de cada uno?

Cuarentena no se puede hacer, pero se van a controlar los síntomas antes de entrar o  salir de una reserva. En ese punto hay una gran responsabilidad por parte del huésped.  Más que tomar la temperatura, controlar el distanciamiento, disponer del alcohol para las manos e indicar el uso de tapabocas, no podemos hacer nada. Ahí es donde el personal del hotel debe tener la máxima precaución cuando cumple con su servicio porque hasta un punto se puede llegar a cuidar, después depende de cada uno.

¿Tienen reservas? ¿Ya se sabe la fecha de apertura?

Estamos esperando la respuesta de Nación. Consultas tenemos muchas, pero no pasa de eso. La gente, hasta que no tenga la certeza que pueda venir, no va a tomar una decisión. La hotelería de alta gama también depende mucho de los aviones. La gente está esperando confirmación de cuándo se va a poder viajar para concretar una reserva. Todos los hoteles estamos trabajando con una gran flexibilidad. 

Desde principio de la cuarentena nos estamos capacitando, manteniéndonos informados, haciendo cursos. Cumplimos con lo que dice el Ministerio de Turismo. Ahora nos queda la parte final para que nos aseguren los últimos detalles.

Por Cecilia Russo
Especial Bariloche